«Concretamente, el 68% de los tumores de piel se localizan en la cara y cuello, y un 23% de estos, en la nariz», explica este experto, quien precisa que «este alto porcentaje puede deberse a la elevada exposición solar de esta zona del cuerpo y a una mayor longevidad de la sociedad española».

Sainz Arregui señala que, en este tipo de cirugías, en primer lugar se procede a la extirpación del tumor, y a continuación, a la reconstrucción estética de la nariz. «La gran mayoría de los cánceres de piel que son diagnosticados a tiempo pueden tener curación. Así, los pacientes están cada vez más concienciados de la importancia del diagnóstico precoz y acuden con mayor frecuencia al cirujano», ha argumentado.

En general, los expertos aconsejan que si una lesión en la piel no se cura en un tiempo prudencial o si un lunar cambia de forma o color se consulte al cirujano plástico o dermatólogo para que realicen una valoración y tratamiento de manera precoz.

Por otra parte, los motivos estéticos son otra de las razones para entrar en el quirófano. «La nariz es una parte de la cara expuesta a una valoración constante, una peculiaridad que presenta frente a otras partes del cuerpo», ha señalado este especialista.

El perfil del paciente, describe Sainz Arregui, es el de una persona joven, de entre 20 y 40 años de edad, disconforme con su nariz, que precisa de equilibrio en la cara. «Los tres motivos más habituales son presentar una nariz de punta ancha, de punta caída, o de dorso nasal prominente», ha señalado.

Por otra parte, y en relación con las fracturas de nariz por accidentes de tráficos, este experto ha reconocido que estos incidentes han disminuido. «Los accidentes, traumatismos y agresiones, si bien son aparatosos, representan simplemente una fractura del hueso de la nariz y/o del pirámide nasal. Con una intervención relativamente sencilla, de 10 ó 15 minutos, se consigue un resultado óptimo», ha precisado.